Tanteando porque aunque era la idea, no me atreví. Estaba tan cansado que conforme fui llegando al alto del dólmen de diez campanas, dejé de verlo claro... Así que llegado allí paré, dejé que bajaran las pulsaciones, me refresqué como pude y comí medio plátano.
Es duro dormir mal, descansar poco en general, por los niños y salir a hacer deporte. Pero sienta bien y he de sumar km si quiero afrontar la media de septiembre. Lo que se pueda, pues lo que se pueda... Pero algo. Y además me sienta fenomenal mentalmente.
Sigo desde allí hacia el camino del Cenarbe pero me "tiro" por el Orbil hacia Aratorés para volver desde allí hacia Villanúa. Intento a la altura de parte de las obras del canfranero pasar por un tunelcillo para cruzar al otro lado pero está enfangado y he de volver hasta el desvío sobre mis pasos.
Sigo por el Orbil con el pueblo ya a la vista y tras dos confusiones con el desvío esta vez sí tomo el camino de las espetreras en sentido contrario al que habitualmente tomo para llegar hasta casa. Menos de lo que pretendía, más de lo que esperaba. Seguimos! ;)