Hacía tiempo que quería ir a visitar la Foz. Finalmente, llega el día... El viernes cogemos las cosas y ponemos rumbo al camping de Sangüesa (Zangoza). Justo el fin de semana de fiestas... Vaya ojo. A pesar de tener que rodear Olite y circunvalar Sangüesa para llegar a nuestro destino, no fue nada mal el fin de semana.
Tras reconocer el lugar y cenar, nos vamos a la furgoneta. Disfrutamos de unas hambuerguesas y bailes tradicionales que los lugareños bailan en los porches de la plaza antes...
A la mañana siguiente, tras desayunar con la calma, cogemos el coche hasta Lumbier. A la entrada del pueblo a la derecha, hay un desvío indicado que tras unos 2km, da acceso a una pista que desemboca en un parking regulado.
A partir de allí, tomamos el sendero junto al resto de excursionistas y recorremos la Foz disfrutando del paisaje. En el la linde con Liédena, tomamos una bifurcación ascendete señalizada que remonta la loma hasta una pista de tierra ancha.
Seguimos subiendo entre matas de endrinas, encinas y otros arbustos. Dejamos el desvío hacia uno de los parkings y seguimos en subida por un sendero que remonta hacia la sierra. Entre avistaderos de aves, llegamos al arco de piedra y tras remontar un poco más a lo alto de la sierra.
A partir de aquí, comienza el regreso, cresteando toda la sierra hasta llegar a la ermita de la Trinidad. Hacemos una parada para comer y beber algo y emprendemos el descenso hacia el pueblo.
Desde el pueblo, al que llegamos por la zona deportiva, tomamos las indicaciones de un sendero que lleva de regreso hasta el parking de la Foz siguiendo el curso del río.
Una bonita circular de 13km y casi +700m de desnivel que nos deja a las puertas del mediodía con hambre y ganas de siesta. Tras un homenaje en el Yamaguchi, a la ducha y a la cama.
Al día siguiente, visitamos Javier y regresamos atravesando las 5 villas. Gran fin de semana, donde a pesar del viento hemos gozado de muy buen tiempo. Seguimos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario