domingo, 27 de septiembre de 2015

10k IX Maratón ciudad de Zaragoza

Como jóven empresario, jejejejej, recientemente he entrado a formar parte de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Aragón. En Zaragoza. Esta primavera salió adelante una iniciativa de networking muy bien pensada dentro de AJE.
Recogida del dorsal y feria del corredor tras el rodaje del sábado

Con la colaboración y dirección de la clínica PODIUM y FisioZaragoza, un grupo de novatos, iniciados y expertos corredores hemos podido compartir durante estos meses en #ClubAJErunning horas de entrenamientos, clases de técnica, de nutrición, de ejercicios hipopresivos, las magistrales recetas de ChefAtleta, ... Pero sobre todo hemos gozado de la dedicación de Victor, Alex y el resto de profesionales de PODIUM. Nos han ayudado a mejorar física, técnica y nutricionalmente a todos, Cada uno a su nivel, a llegar al primero de los retos de este grupo de amigos (que después de todo este tiempo y lo compartido, es lo que somos) en las mejores condiciones posibles.
 Foto oficial antes de la salida del maratón

Finalmente, Toño y Carlos han corrido la maratón en 3:30 y 3:43 respectivamente. ¡Unos campeones! El resto en la 10K muy, muy bien. Todos hemos terminado y prácticamente todos, hemos mejorado nuestras marcas personales. A destacar los que se iniciaban en esta distancia e incluso en este deporte, ¡Espectacular! También tenemos un par de rayos en la 10k que han terminado con 38' y 42' los diez mil metros.
Diego, Félix y yo en el km.8

En lo que respecta a mi carrera, ya serán una docena de 10k las que he corrido y en esta he disfrutado y me he visto mejor que en otras. La razón, ya la he comentado antes... Junto a Diego y Félix con los que en los últimos entrenamientos pudimos ver que más o menos íbamos a la par, nos colocamos junto a la liebre de 50' en la salida junto a un par de compis más, con idea de ir avanzando hacia el globo de 45' en función de las sensaciones. He de decir que desde el sábado la garganta y las tripas me han dado guerra y tenía miedo de quedarme sin gasolina si llevaba un ritmo demasiado alegre. 
Las chicas son guerreras

El calentamiento que por primera vez antes de una carrera así hago en condiciones, me entona el cuerpo y me anima, aunque prudentemente tomo la salida junto a mis compañeros, consciente de la importancia de escuchar mi cuerpo y coger un ritmo que me permita aguantar y progresar de acuerdo al plan. Lo hacemos bien y en el km.2 hemos pasado la liebre de los 50'. Hacia el km.4 nos quedamos los tres solos y aguantamos el ritmo. Un ritmo entre los 45 y 50 minutos. Finalmente, llegaremos en 47'34", justo en medio de esos dos globos.
Recorrido y tramos, clasificación absoluta de la 10k

Las rampas que encontramos en la segunda mitad del recorrido, pican, pero la gente anima y el ambiente es mayúsculo. Nos vamos arropando los tres, como un equipo ;) El último kilómetro es una gozada pasando por el Coso, don Jaime, calle Mayor, calle Alfonso y plaza del Pilar donde estaba la meta. Entramos juntos con las manos alzadas celebrando el buen trabajo hecho.
Descansando feliz después de mejorar mi marca en 10k... Y disfrutando!


Recuperamos en las carpas de fisio Zaragoza y nos felicitamos conforme vamos agrupándonos mientras comentamos las anécdotas, sensaciones y emociones de la carrera. La verdad que en este tiempo hemos hecho un grupo super majo, muy sano en el sentido físico y en los demás, también. Para mi, ha sido un verdadero lujo conocer a todos mis compañeros en estas circunstancias, que nos ha permitido a todos estrechar lazos y compartir los valores que este deporte pone a tu alcance de una manera tan agradecida.
Qué gozada la piscina de agua helada de Fisio Zaragoza...

El día acompaña con un tiempo agradable para correr y antes de recibir a los maratonianos del equipo, vemos batir el record de España de veteranos a manos del ganador absoluto de la prueba, José Antonio Casajús con un tiempo de 2:25':14" anteriormente en poder de Martín Fiz. Una auténtica machada que tenemos el privilegio de ver y escuchar el testimonio de boca del mismísimo protagonista, un crack.
Un honor haber podido charlar con José Antonio Casajús en un momento tan especial

Tras la llegada de Carlos y Toño, cada mochuelo a su olivo con ganas de conocer el próximos reto. Algunos lo han celebrado con una comida bien merecida ;)

lunes, 21 de septiembre de 2015

Monte Perdido (3.355 m.) por punta escaleras

Ascensión al macizo calcáreo más elevado de Europa y tercer pico en altura del Pirineo tras el Aneto y Posets que Mon había programado para este fin de semana junto a su amigo Manolo "despatárrate" y el que escribe estas líneas. Salida al monte bendecida desde el primer minuto, ya que si teníamos plaza en el autobús que desde Nerín deja a los montañeros al comienzo de la faja de Pelay, pero no así el alojamiento del viernes a la noche... Tras quedar en la gasolinera de Villanueva, punto de encuentro habitual, ya camino del Piri y tras un par de llamadas conseguimos las 3 últimas camas en el Albergue de guarda fuentes en Buerba, a veinte minutos de Nerín.
Empezamos a andar de noche

Llegamos a Buerba a la hora de la cena. Nos presentan a nuestros compañeros de habitación, cinco zaragozanos que intentarán el cilindro y que saldrán en el siguiente autobús al nuestro, así que les despertaremos a las 4.40 a.m. hora en que tras haber cenado una copiosa cantidad de verduras, ensalada y carnes a la brasa y haber dormido cuatro horas escasas, no ponemos en pie.
"La soledad del guía"

Un café y algo de comer, revisar las mochilas y al coche. Llegamos puntuales pero nuestros nombres aparecen tachados en la lista del chófer. Afortunadamente, el error es suyo y sentados en el pasillo del autobús, salimos hacia Ordesa.
A la vuelta con la luz de la tarde pudimos contemplar Ordesa en toda su plenitud

Aún es de noche y tenemos que empezar a caminar con los frontales. La gente se apresura entre la oscuridad... Dejamos que todos marchen, ya les adelantaremos. No hay prisa. Me quedo con dos dichos que Mon y Manolo recuerdan de cuando sus padres les decían; << Caminar como un viejo para volver como un joven. >>, << Se sube con el corazón y los pulmones y se baja con las piernas. >>.

No podemos ver el cañón de Ordesa, ni el río ni las paredes del Tozal y el Gallinero... Pero si vemos amanecer sobre el macizo y otros montes como las tres Marías. Poco a poco amanece y nos regala unas vistas espectaculares tanto en colores, como en formas, tamaños... A la vuelta podremos contemplar lo que en estas primeras horas no ha sido posible.
















Casi sin darnos cuenta dejamos atrás la faja de Pelay y llegamos al refugio de Góriz donde la animación es creciente. Allí, a 2.160 m. comienzan la mayoría de ascensiones de la zona. Los montañeros alojados en él van viendo como llegamos los que nos hemos alojado en otros lugares del valle más lejanos o los que han madrugado y vienen de ciudades como Getxo o Donosti.

Breve parada para repasar las indicaciones, ajustar el altímetro y comer algo e hidratarnos. Partimos hacia arriba por la ruta normal junto a más montañeros y perros. A 2.500 metros, tras llevar ya caminados 6 km, nos desviamos hacia la derecha por un corredor que nos da acceso a la ruta por la que queremos ascender. La ruta o vía de las escaleras. En vez de subir a la cima por la escupidera, por el Oeste, iremos por la cara Sur entre corredores y con alguna pequeña trepada, teniendo en su última parte un diedro que es conveniente proteger.
 De Ordesa a punta escaleras
De punta escaleras a Monte Perdido

Progresamos hasta punta escaleras entre camino y trepadas. Desde allí puede admirarse un paisaje de ensueño con el macizo frente a nosotros y el valle, el cañón de Añisclo, Peña Oroel, el pico Taillón, la brecha y otros relieves de sobra conocidos. Tras un almuerzo a base de chorizo y whisky de malta vamos hacia la cima. Avanzamos por un pedregal en zig-zag hasta la última trepada, la más dura y expuesta de todas, la más bonita. Teniendo cuidado con el verglas, vamos seleccionando pies y agarres hasta llegar arriba. Manolo, se ayuda de una cuerda fija y es que para alguien que no escala, además de la prudencia, no está de más ayudarse de la cuerda. En caso de que esta no hubiera estado, su aspecto no nos hubiera gustado o evaluada la situación decidiéramos que había que encordarse, habríamos montado una reunión y asegurado con la cuerda y bagas que llevábamos.
























Dos de los tramos de trepadas que tiene la vía de las escaleras. Manolo dándolo todo ;)

A las 12.00 hollamos la cima con bastante viento y frío. Hay nieve y hielo. Poca gente... Pero si se ve progresar al resto de personas por la escupidera. Tras las fotos de rigor y contemplar el glaciar, nos apresuramos a bajar para protegernos del frío. Tras unos penosos metros en los que las caídas acechan por lo resbaladizo del terreno, evitando a los que suben, nos desviamos a la izquierda para continuar descendiendo por una cresta de roca, libre de hielo y nieve, hasta llegar al lago a pies del cilindro. Allí continuamos ya por la normal donde nos encontramos con un montañero que nos pide ayuda para atravesar un paso protegido con un pasamanos de cadenas, Sus compañeros han continuado hacia la cima, pero él tras llegar al lago no se ha visto suficientemente preparado material y técnicamente, por lo que acertada y prudentemente, decidió dar media vuelta al encuentro de otros compañeros que se quedaron más abajo haciendo fotos. El problema es que hay hielo y ya tuvo dificultades al pasar de subida. Le ayudamos y agradecido continua, aunque más adelante nos lo volveremos a encontrar, ya va cansado y con el miedo en el cuerpo y aunque este otro destrepe no contempla dificultad real, terminamos por ayudarle y enseñarle a salvar este tipo de resaltes. Sus compañeros escuchan la advertencia que mientras les ayudaba, Mon les hace en relación a no separarse de compañeros que no están suficientemente preparados.


















Algunas fotos de los últimos tramos y de la cima


Comentamos que son varias las personas que hemos visto pasando dificultades en el camino y con posibilidades de tener verdaderos problemas... Cuidado, por favor.




















Mon y yo con el glaciar al fondo, ya de bajada (izquierda). El cilindro con el lago a sus pies (arriba).

Lo que queda aparte del haber disfrutado de las mágicas vistas de Ordesa y el café en Goriz, es poco. Poco que es mucho... Viaje de vuelta a ritmo de petersellers y conversaciones ligeras y profundas. Nos plantamos cansados pero felices en Villanueva y después de los abrazos, a casa a comer y descansar. La próxima, ¿Para cuándo?