lunes, 29 de octubre de 2018

Circular al collado de Petreñales desde Nocito

Este fin de semana entraba en la Península el (para muchos) esperado frente de frío y nieve. Coincidiendo con el cambio de horario y de luna, parece que el veroño deja paso al invierno.

Desde Os Andarines, se había programado una salida al Perdido haciendo noche en Góriz pero hubo que posponer la reserva y buscar alternativas más protegidas del temporal. Tras barajar el miércoles en la sede del club distintas opciones, pensamos que el Tozal de Guara, por situarse más al Sur, estar a menos altura y ubicarse en la Sierra de Guara -que tiene un microclima más benévolo- podría ser una buena opción.

Quedamos a las 7 de la mañana para salir de Zaragoza en dos coches; Paco, Carlos, Pedro, Armando, Jesús y yo y acudía a Nocito directo Javier. Algo antes de las 9 de la mañana estábamos en Nocito. Desde Arguís nevando. Así que ante la más que probable situación de no poder subir hasta el Tozal, reservamos mesa a las dos en Casa Ortas Albás (muy recomendable si estáis por la zona!). Con lo importante bien atado, nos ponemos las botas, cogemos las mochilas y nos ponemos a andar.

Comenzamos a ascender suavemente entre bosque en dirección al tozal la nieves va a acumulando en los árboles y de vez en cuando caen costras de esta por el peso espolvoreando a su paso al afortunado que en ese momento andaba por ahí. Tras algo más de media hora nos encontramos con un cruce de caminos donde tomamos la dirección al barranco de la Piñera.

Continuamos ganando altura para después, en un cambio de vertiente donde nos asomamos hacia el Norte bajar unos metros para adentrarnos en el barranco. Allí continuamos por el camino en dirección al Tozal y dejamos un desvío por el que volveremos. Paramos un par de veces a picar algo y beber agua, admirar el blanco paisaje y las mezcla de verdes, rojos y amarillos con el blanco recién caído, la gran cantidad de setas que se acumulan a los bordes del camino. Un espectáculo.

Continuamos ganando altura entre bosque y terrazas hasta llegar a un claro donde se abre un poco el terreno y desde el que afrontaremos las últimas cuestas antes de llegar al collado de Petreñales. Allí es donde decidimos dar por finalizada la ascensión, por la hora que es y lo cubierto que está todo a partir de esa altura.

Tras las fotos de rigor y picar algo, abrigarnos... Comenzamos el regreso. Deshacemos nuestros pasos hasta el desvío que dejamos en el barranco y tomamos la bajado entre robledales donde, a pesar de que la nieve y la lluvia se alternan, predominan los colores rojizos y amarillos por una alfombra de hojas. La verdad es que está precioso y cuesta no pararse continuamente a admirar los matices de las luces y colores, hacer fotos...

Continuamos perdiendo altura y acercándonos a Nocito para lo que tenemos que cruzar en sucesivas ocasiones el río. El paisaje va cambiando y ya no dejaremos el curso del río y sus curiosas bañeras y oquedades hasta la pista que parte de este 1 km antes de llegar al pueblo.

Terminamos puntualmente a las dos tras 16 km y unos 800 metros de desnivel. Al menos, nos ganamos el fabuloso almuerzo que nos tienen preparado nada más entrar al restaurante. Así, sí jajajajaj!

domingo, 14 de octubre de 2018

Del pozo al barranco

Poco a poco voy saliendo del pozo del verano y del frenético inicio de curso... Y si bien no estoy entrenando tanto como me gustaría, ni como me gustaría... Me estoy escapando a hacer metros, aprovechando las ocasiones que se presentan.
 
Ayer era una de estas. Madrugamos Juan y yo para ir a la Foz de Zafrané. Los dos teníamos compromisos vespertinos y optamos por salir pronto para que nos cundiera algo. Además, como anunciaban retenciones en la A2 y cuarto cinturón, pensé que la carretera de Valmadrid era el camino a seguir. Y allá que fuimos.
Aspecto que mostraba ayer la entrada al barranco con la niebla. Pintoresco cuanto menos...
 
Al salir de Zaragoza y tomar el desvío al PTR en la Cartuja poco a poco fuimos engullidos por una niebla a 15º que no nos hacía presagiar buenas condiciones (humedad) para escalar. Sin embargo, a pesar de que el largo en el que calentamos en la pared del Vulcano; "Vía de los cuervos, V" estaba mojada en algunos tramos, la característica roca y lo árido y seco del lugar hacían que la vía fuera practicable.
 Diferencia entre las 9 de la mañana y las 2 de la tarde
 
Tras calentar en esta clásica que Juan no conocía, elegimos "La llave de la vida, 6a" que también había hecho. Le comento a Juan que el paso está entre la 2ª y 3ª chapa, con un fino movimiento en placa de pequeños agarres y mover los pies en travesía, pero que no se fie porque luego hay que aguantar hasta la reunión. Aunque cae en el paso en el primer pegue la matiza y, tras el mío, le vuelve a dar y la encadena después de una buena luchada. Es su primer 6a y ya se sabe la ilusión que hacen estas cosas :)
Juan en "La vía del cuervo, V"
 
Es mi turno y decido irme a las primeras vías de ese lado del barranco en la pared de enfrente, las placas al Sol. Elijo una vía que alguna vez he observado y por la que no se por qué motivo siento curiosidad, "La abuela delfina, 6b+". Como aún estoy calentando, decido montar la vía con la que comparte reunión y que tiene un grado más amable "El abuelo Miguel, 6a". Bueno... Aquí se va a centrar mi jornada de escalada puesto que el primer pegue lo he de hacer montando la vía de cinta a cinta (y eso que son 4 chapas y la "r". Cortita pero...) y limpiándola. La vía tiene mucha tierra y piedras sueltas, se ve que no es muy repetida... Algo comprensible porque un 6a desplomado tan corto...
Si, yo también me pregunto a qué me metí precisamente en este trocito de roca...
 
El segundo pegue lo hago de segundo para ver los pasos y la encadeno. Muy explosiva y obligada con una pequeña travesía a la reunión, aunque bien asegurada, tiene tela... El tercer y cuarto pegue los hago escalando muy bien pero cayendo en la reunión ya que la secuencia es algo rara y de pies malos. Al final, en el quinto pegue (no recuerdo nunca haber dado tantos pegues a un 6a...) la encadeno al límite. En fin... En casa miro en el 8a.nu a ver qué dice la gente de la vía y no me sorprende no encontrarla en la lista. En cuanto al grado, pues no se qué decir. Estas cosas no las controlo. Si que puedo decir que Juan no pasó de la segunda cinta y no quiso repetir... Del 6b+ poco que decir porque ni llegué a probarlo. Otro día...? No creo, ¡Jajajajajja!
¡Viva la Virgen del Pilar!
 
Entre tanto, le animo a Juan a que pruebe una clásica que en su día hice a vista y que me pareció preciosa. "Diedro Cintero, 6a" El nombre lo dice todo. Un estético diedro que sigue una línea visible desde lejos. Ideal para iniciarse en la técnica. Se la lleva. 2º 6a. El mismo día. Y primero a vista. Parece que la Foz se le da bien...
El diedro Cintero
 
Lo siguiente que hacemos por terminar el día. (*A lo tonto no son ni las dos y llevo ya 7 largos de buenas "pretadas"...) son unos quintos en el Vulcano. "Paketomix, V" que sigue una línea de fisura y placa bonita y "Simba, V+" que comparten reunión. Yo sólo desmonto la primera, voy servido.
 
Otro día más. A ver si se ordenan las semanas y vamos recuperando rutinas.

lunes, 1 de octubre de 2018

I curso de iniciación a la escalada "Os andarines"

Los pasados domingos días 23 y 24 de septiembre, de la mano de Guías Cara Oculta, tuvo lugar en Morata de Jalón el primer curso de iniciación a la escalada de Os andarines.

Juan organizaba esta interesante iniciativa que, a pesar de no haber tenido una acogida multitudinaria en la asociación, el resultado fue muy bueno. El grupo de media docena de andarinxs aprendió las maniobras básicas de aseguramiento y progresión en pared equipada, practicando caídas, descuelgues, rápels,...

Por mi parte, se trata de la primera actividad en la que como socio de Os andarines participo. El primer domingo no pude acudir a Morata pero ayer sí. Tanto Juan como yo que no participamos como alumnos, sino que colaborábamos, pudimos aprovechar y hacer algún largo al montar las vías que luego escalarían el resto.
Robert de GCO explicando como mosquetonar la cinta al escalar de primeros

Tras el pertinente encuentro y café con Robert de GCO en el albergue de Morata, nos fuimos para el aparcamiento de la de la gran placa. Aprovechando el poco rato de sombra que nos quedaba nos pusimos a escalar en dicho sector. Montamos "Edelweiss, IV+" y "Bar vodka, V" que ya habíamos escalado y dejamos que los alumnos progresaran en ellas. Estas dos vías, son de las que se han equipado recientemente.

No sabemos qué montar mientras Robert y sus alumnos trabajan ya que no es necesario que nosotros echemos una mano en esos momentos, así que decidimos hacer algún largo más por la zona con vistas a que después lo hagan ellos...
Sandra e Inma practicando reuniones y Carlos escalando en "falso primero"

Aparece Juan Carlos, a quien no conocía hasta ayer... Se había acercado a Morata con la esperanza de encontrarse con conocidos con quienes poder escalar. No lo hacía desde enero y, dado que tampoco llevamos un objetivo fijo, le ofrezco asegurarle. Nos presentamos y le propongo subirnos por "Mea burro, 6a" una de las vías antiguas que yo pensaba que era V/V+... Nos damos cuenta que no cuando en la pequeña panza que hay a mitad de vía se le atraviesa el paso a bloque, el que le da el grado. Tras varios intentos decide darse un respiro y dejarme probar. Estas vías morateras "te ponen en tu sitio". Voy subiendo metros y llego al punto donde JC se quedó. Veo claro que el movimiento es obligado ya que no hay más opciones ni agarres para superar el paso. Se trata de un buen bloqueo de derecha sobre un bidedo invertido que hay que hacer bueno subiendo pies y posicionando el cuerpo para luego sacar el brazo izquierdo a una pinza y recolocar manos con ayuda de una regleta para subir aún más pies y chapar. Superado este mini-bloque, a disfrutar hasta la cadena.

A pesar de trancazo que me abraza, escalo bien y la encadeno sin mucha complicación. Quizás sea porque cuando uno escala sabiendo que la fuerza no le acompaña, escala más fino, mejor... Les toca, de nuevo a Juan Carlos que decide darle en polea, y a Juan que hace lo más difícil pero se queda sin fuerzas a punto de chapar en el paso. Oootro proyectito para el nene ;)

A pie de vía conozco a David, otro escalador que pasaba por allí y saluda a Robert. Me dice que sigue mi blog y me conocía de las fotos de este. Me quería saludar y decirme que le gusta mucho mi forma de escribir. La verdad es que aunque inesperado, es una nota simpática que no quería dejar de reflejar aquí. ¡Gracias David!
"escalarines"

Es la hora de comer y buscamos la sombra de la chopera. Ya camino del Alí, donde terminaremos la jornada con un taller de rápel, más vías de primeros los alumnos y algunas "bolas extra" que Robert, junto a David que se incorpora a mitad de mañana, nos regalan.
 Mejor mesa no podían habernos dado...

Al final del sector, a la sombra, escalamos varios largos. Nosotros escalamos también y aprovecho para hacer algunas vías del sector que no tenía como "Yures, V" y "Clásicos de ayer y hoy, V-". A pesar del grado, si bien es cierto que Yures estaba bastante sucia y tiene más metros, me parece más difícil Clásicos... que tiene un paso de pies fino de confianza y equilibrio sobre unos relieves romos que no sirven más que para colocarse, nada de tirar. Pero bueno, lo de siempre con el grado...
Guías, alumnos y colaboradores del I curso de iniciación a la escalada de "Os andarines"

Damos por terminada la jornada y el curso con un feed-back con Robert y David y nos acercamos a tomar una cervezas al albergue de Morata muy satisfechos; unos con lo aprendido y haber descubierto (parte) del mundo de la escalada deportiva, otros con una jornada donde además de volver a escalar seguimos aprendiendo.