miércoles, 29 de junio de 2016

Tú eres Pedro y sobre esta piedra...

Escalarás. 

29 de junio, San Pedro y San Pablo. Un homenaje si que me voy a dar aparte del txuleton que me ha preparado para comer mi madrina...

Quedo con Sergio, como ya se está convirtiendo en una maravillosa rutina, a escalar de mañana. Y trabajar por la tarde. Que no sólo de pan y roca vive el hombre.
Al fondo el muro de calidad donde andamos estas semanas

Montamos para calentar (aunque se que tengo que calentar en vías más suaves...) Metanoia, 6b que es para mi el objetivo, tras haber encadenado su vecina Paranoia, 6b+ y haberla probado el otro día. Del estilo. Aunque creo que me cuesta los mismos pegues, me resulta más fácil. Es una vía más mantenida en su grado que la anterior pero más fácil, sin pasos tan duros como la otra.

Tras mirármela y refrescar los movimientos, re-calentar y descansar, le doy el pegue bueno. Hasta arriba y con los brazos relativamente bien. Contento. Eso de encontrar el agujero clave seco y no mojado sin duda facilita las cosas. Pues eso, en mi opinión el 6b está bien en comparación a su vecina.

Pasamos a Popocho Cochón, 6b+ que aunque en un principio no me atrae mucho, luego reconozco que me ha gustado. Eso si, todo concentrado en las chapas 2, 3 y 4. Después de esa sección de bloqueos largos en pequeñas y malos pies, es un cantizal. Queda pendiente, junto a Chus Power, 6b+ que tiene pintaca pero ya probaré otro día.

Para terminar el día, vuelvo a darle al V+? de la derecha del todo. Consigo llegar esta vez encadenando a la última chapa, pero de nuevo cansado caigo. Buen entreno. Ya caerá... Recogemos y a comer. 

domingo, 26 de junio de 2016

Sombras de verano, tan buscadas como las buenas vías

Ayer sábado, el tridente formado por Ricardo, Ricardo Jr., y yo marchamos tempranito para la Foz. Lógicamente, no hacía el calor de estos últimos días pero había que buscar sombra y cercanía...
El secano más puro y aragonés envuelve el singular enclave de la Foz

Al llegar, ya con la carretera totalmente arreglada, vemos que no va a haber mucha gente. Tan sólo Óscar en la cueva bricoleando y David y Marcos que llegaban en ese momento también. Nos dirigimos al jardín flotante. En general buenas vías y, lo más importante, sombra casi todo el día.
Por este estrecho paso se entra al barranco

Calentamos en La pareja almeja, 6b+ que no la había probado y tenía ganas. Tras Ricardo, me toca y le doy un primer pegue muy bueno, cayendo a dos movimientos de la reunión. Eso si, acabo inflado. Vuelvo a equivocarme en el calentamiento... Pero ahí no terminarían las dificultades de la jornada para mi, tras casi un mes sin tocar roca y entrenar cuando he podido.

Ricardo, monta lo que en principio era para mi el objetivo a trabajar ayer, Espalda cangrejera, 7a. Pero la vía me ha gustado y decido darle otro pegue, así que la dejamos montadas y, también Espalda... 

En estas que sigo yo en la que ha pasado a ser mi objetivo La pareja... y doy uno de eso retropegues en los que tras dos movimiento, ya uno ve que no y decide bajar para volver a empezar desde el suelo. Sin embargo, sigo sin haber recuperado los antebrazos y tengo que parar y descolgarme a mitad de vía para reposar mejor.

Entre tanto montamos un columpio para Richie que la verdad es un cielo de crío y nos permite escalar y echar unas risas con sus juegos entre pegue y pegue. Después Ricardo, va a por Torolobo, 7a+/b en el primer pegue cae en el paso clave, pero lo resuelve y en el segundo pegue encadena sin mucho problema.

Sigo con mi tarea del día y en un tercer pegue vuelvo a resolver y matizar mejor los movimientos para en un siguiente pegue, con los brazos esta vez si con buenas sensaciones, lanzar un ataque final. Pero no lo hubo... Ya el hecho de que uno de los pájaros de un nido sito en uno de los agujeros de la vía, se cagara en mi antebrazo, debía haberme hecho presagiar que iba a encadenar la vía, pero no ayer. Tal cual comienzo con los movimientos memorizados a correr por la vía mis dedos arden y, a pesar de intentarlo, vuelo y me tengo que bajar. 

Las yemas de los dedos rojas y sudando, brillantes y alisadas, una ampolla en el dedo anular y muchísimo escozor en las manos me dicen que, muy a mi pesar y con los brazos y cabeza respondiendo, la jornada ha concluido para mi.

Ricardo, por completar el día, hace en dos pegues Regleta, regletae, 6c+/7a y desmonta, encadenando de nuevo y otra vez en polea Espalda... Aún le montamos otro columpio a Richie y tras recoger cacharros y juguetes, nos volvemos para casa. 

lunes, 6 de junio de 2016

Ya llega el calor, ya llega la fruta y, yo, recogiendo frutos :)

Continuamos con las denominadas "salidas express" Sergio y yo mano a mano. Él tiene que preparar la prueba de violonchelo y para ello ensayar mucho y, yo, básicamente soy autónomo. Y gracias que tengo un socio que me cubre una mañana/tarde a la semana y, claro, yo a él también... Aunque para intereses distintos.

Los míos, últimamente se sitúan en la roca y, con Sergio, en el puente de roca de Morata. Allí que he ido tachando 6a's que cuando empecé en esto me hicieron volver a casa con las orejas gachas y, probando vías más interesantes y más duras.

Nos ponemos a calentar directamente a la zona donde está mi objetivo Paranoia, 6b+, en Metanoia, 6b otra vía que probé hace dos o tres años y que quiero poner en la lista de "asuntos pendientes". Me hace recalentar y casi, casi... Que ya no recupero en toda la mañana. Qué chulas son estas vías...

Después pasamos a Paranoia, 6b+ y el primer pegue, sin haber recuperado todavía antebrazos de antes, me hace colgarme tras el paso más duro. Con las manos abriéndose y los antebrazos con pinchazos. Falta resistencia por todos lados, pero bueno, hemos venido a escalar.

Toca tercer largo y Sergio repite vía y desmonta Metanoia, 6b tras insistirme en que repose y vuelva a darle, con los movimientos bien aprendidos, a mi objetivo.

Así lo hago... Típico pegue que empiezo mal. La cuerda molestando con la primera cinta. Me bajo otra vez y volvemos a empezar. Durante el reposo y tras un fallo en un agarre que me hace gastar mucha energía en el primer pegue, hago hincapié en no enfadarme conmigo mismo e intentar cambiar los mensajes negativos que rondaban mi cabeza junto al cabreo ("Eres un paquete.", ... "Lo has hecho bien otras veces, ¿Qué estás haciendo ahora?", "Estás petado, ya verás como no vas a llegar al reposo."...)  por otros positivos ("Has venido a escalar. Disfruta, que hace un día muy bueno.", "La vía es *****, concéntrate en ella y nada más ", "No te va la vida en ello." ,...)

Total que a pesar de sentirme cansado y con los antebrazos hinchados, creo que resulta. Me planto en el paso, respiro tras una primera sección intensa, y sale como si nada, fácil, como nunca hasta ahora me había salido. Casi me quedo paralizado de la sorpresa, un segundo después reacciono. Hago los movimientos de memoria (a pesar de ser el cuarto pegue que le he dado...) y sigo hasta la repisa donde puedo soltar brazos antes de la última parte. En el primer intento de salida del reposo me equivoco de agarre y tengo que volver al punto de partida, volver a soltar brazos y esta vez, si, salgo bien, aguantando y con la reunión en la cara, el miedo al éxito me ronda. Pero aguanto. Un agarre de hombro de izquierdas con pies en adherencia que me hace sudar de lo lindo. Tengo la cuerda en la mano y mientras intento regular la respiración deslizo la cuerda por el mosquetón y ya.
Sergio en uno de los aseguramientos de estos días conmigo por ahí...

Grito de alegría verdadera. Qué gozada. Qué recompensa. Ha sido una lucha para mi y disfruto del triunfo. Aunque ha sido más importante para mi el haber sido capaz de cambiar de actitud. Creo que me puede ayudar a encadenar más vías y mejorar personalmente también.

Desmonto, estamos servidos y bajamos para Zaragoza. Escribo esto fresco para intentar no dejar de reflejar nada de lo que he sentido y pensado en esta jornada de escalada. Lo mejor, que quedan muchas más.