domingo, 25 de abril de 2021

Saliendo del túnel

Tras lesiones físicas, pandemia mundial, cambio de trabajo y avatares personales -la vida misma, vamos- la adrenalina dejó paso a la relajación y, esta, al descanso. Este último, necesario. Del descanso volvemos a la acción y, como he podido comprobar en varias ocasiones, la rueda seguirá girando en esta dirección... Por lo que iré "rodando" aprovechando y adaptándome a las inercias que me permitan disfrutar de una cosa y otra.

Hoy es día de seguir levantando el vuelo. El mal tiempo (hoy mientras escribo estas líneas llueve...) hace que opte por salir a trepar el sábado en el día. El viernes es festivo pero la resaca de la semana me animan a no forzar motor y "descansar" (que para mi no es estar en la cama pero sí no escalar...). Hago bien. El sábado disfruto de un buen día de escalada, en mejor compañía y en progresión ascendente.

Tras el premio del finde pasado, toca seguir trabajando. Quedo con Antonio y lo recojo a las 10. Ponemos rumbo a Morata (algo cerca, dan lluvia a partir de media tarde y así será) donde tras asaltar la panadería del pueblo y tomar un café, aparcamos en las vías y plantamos nuestras cuerdas al pie de la pared del túnel. Un sector poco frecuentado por mí. Con vías buenas donde se alternan las más cortas y atléticas con las más largas y técnicas.

Calentamos en "El capricho, 6a" que por lo visto en mi libreta probé hace un año pero no recordaba. Así que realmente voy a vista (una ventaja de no recordar la vía...). Después de calentar bien aquí, vamos a la de su izquierda, una de las "nuevas". Una vía muy bonita y variada, dura en su grado que me hace pelear y volar una vez en el paso hasta encadenarla al tercer pegue, "El profanador de vías, 6b/+" creo que es más correcto 6b+ (estoy haciendo en diferentes escuelas 6b+, incluso 6c a vista o al 2p con relativa frecuencia).

Gran placa desde la pared del túnel

Tras sufrir asegurando a Antonio en "Vejaciones en el mar, 6a???" decido darle una polea y me la llevo. Cuidado con el chapaje de la tercera cinta, especialmente montándola, posible caída hasta el suelo y lo de posible, es factible. Para mi (y para Anotnio) no es 6a, más bien 6b o más... Aparte del paso (parece que en esta sección algo se ha roto por un desconchón que hay...), la primera parte de la vía tampoco es sencilla. En fin, Morata...

Mi sexto y último largo del día (contento por los metros escalados hoy y, sobre todo, por cómo los he escalado e ido de primero, volado, etc.) es una "cuenta pendiente", una vía de la gran placa -sector al que movemos para terminar- que quería hacer y por una cosa u otra, todavía no había probado siquiera, "Anabel, 6b". Ya había hecho hace 3 o 4 años su vecina "Raquel, 6b" y estas cosas tontas de coleccionista, quería la parejita.

Le toca ir a Antonio, así que subiré con las cintas ya puestas. Escalada en placa vertical old school total. Disfruto y aprieto el culo a partes iguales, o sea mucho. Consigo resolver todos los pasos y chapar la reunión sin tener que preguntar. Qué gusto para acabar el día. Víote.

Con esto terminamos y plegamos las cuerdas, recogemos nuestra conversación y lo intentamos meter todo en el coche. Seguimos!

Camino del coche con la lluvia llegando

lunes, 19 de abril de 2021

Cal-cenando

El viernes llegó el día de estrenar la furgoneta (versión mínimo producto viable) y dormir fuera de casa. Mucha ilusión como no puede ser de otra manera. Llegar la víspera a la zona de escalada y dispersarme un rato con los amigos mientras cenamos y bebemos ante unas brasas que nos abrigan, no tiene precio. Lo de escalar o no escalar es un extra ;)


El sábado amanece frío y con viento. A la noche ha helado. A pesar del almuerzo, el cuerpo no acompaña... Pero el día es largo. Voy de menos a más aunque menos de lo que me gustaría. Caliento haciendo a vista "Los panchos, 6b" y decido continuar el segundo largo para probar "No me chilles que no te veo, 7a+". Haré esta combinación una vez más, cayendo en la última cinta antes de la "r" en la parte superior. Buen pegue.


Movemos con el Sol hacia cueva honda. Le doy un nuevo intento al 6b+ más difícil del mundo "Pura vida, 6b+" y en la tercera chapa decido desmontar y largarme una vez más de allí con el rabo entre las piernas y sin verle color alguno. Alucinante...

Nos vamos a la parte de más al fondo donde Luismi y Limón tienen su proyecto del finde "Sopa de bichos, 7c" al que Luismi le da dos pegues, el primero montándola y el segundo muy bueno. Limón monta el proyecto para Chipe (que a la postre será también el mío) y que todavía no había encadenado, "Escalopendro y Escalopendra, 7a", una vía de estética travesía en placa sobre agarres pequeños (fuerza de dedos) y pies técnicos en su primera mitad y de buenos agarres al final. Le doy un pegue también hasta la tercera cinta para ver de qué va y si me levanto entonado el domingo, antes de recoger, darle algún pegue. O no...


De momento, nos volvemos a las furgos y a preparar la barbacoa del día. Esta vez no tan copiosa pero no por ello menos digna. Espectacular los champis con huevos de codorniz... A una hora prudente, nos vamos a dormir, con menos viento ya y algo más de temperatura. Noche plácida. Al despertar, a pesar de haber dormido bien, el cansancio se nota. Veremos qué tal va el día. Sobre la marcha. Además, he de estar a mitad de tarde en casa para preparar la semana.

Nos vamos a almorzar huevos con chorreras de nuevo al bar de Calcena. No sé cuántos huevos he comido las últimas 24 horas... En fin, menos mal que "lo quemamos" todo que si no, ejem. Esperamos que el Sol coja algo más de fuerza y a las 11 en la pared. Volvemos al tercer puente y veo la apuesta. Doble o nada. Decido montar para calentar y ver cómo está mi cuerpo hoy "Costra nostra, 6b+" que hice en polea de última vía un día allá por diciembre y me pareció dura (lo es) y bonita. Con una sección inicial de bonitos movimientos sobre regletas, llegas a la repisa común con sus vías vecinas y comienza una parte de desplome con buen canto para terminar en una placa tumbada de gotas de agua. Deliciosa. Fluyo y disfruto hasta llegar a la cadena mucho mejor de lo que pensaba. 


Hacia las 12 y pico movemos a cueva honda. Aún le da la sombra pero se está perfectamente. Temperatura "chispum" que dice Luismi. La buena para encadenar. Tras darle otro pegue a su proyecto, nos monta la vía para salir con las primeras cintas puestas y evitar sustos... (el lunes me entero de que un amigo se ha fastidiado el tobillo por una mala caída y golpearse con el suelo al inicio de una vía).


Va Chipe que el día anterior la tenía a punto. Pelea como un bárbaro y se lleva su primer 7a!!! Grande! Alegría compartida. Me toca a mi. Como Chipe ya ha encadenado y contagiado su alegría me quita presión y sólo pienso en disfrutar los movimientos y aprovechar el último pegue del finde. A eso me pongo. 


Sorprendentemente escalo fino y con precisión, voy con ritmo y tranquilo. Toca apretar en el paso clave y aunque estoy al límite, consigo pasarlo y llegar al primer reposo, donde no había llegado el día antes en el pegue que le di. A partir de aquí me van flasheando y yo voy eligiendo la opción que más me conviene. En un momento dado, tras terminar con la parte más dura, decido no chapar una cinta ya que creo que invertiría más energía en ello que beneficio obtendría. Tengo claro que no debo caerme y antes, compruebo que lo que tengo hasta la siguiente es muy fácil. No me equivoco. Aún así es algo que nunca he hecho y espero no hacer si no lo veo muy claro y siempre evaluando el riesgo de la caída.

Reposo todo lo que necesito. La parte que queda es fácil y he chapado. Respiro y trato de saborear el momento, a la par que ando con ojo de no tirar nada en un tramo algo sucio llegando a la "r". Inesperadamente he dado un pegue perfecto, mi cuerpo ha respondido con creces y me llevo la vía. Abrazos, despedida de los amigos y al coche para Zaragoza. Cansado pero descansado... Ya sabéis a qué me refiero. Seguimos!

domingo, 11 de abril de 2021

Pared de la cantera

Este sábado tocó salir a la mina, a picar piedra. A currar y recuperar sensaciones. O al menos a empezar con ello. El tiempo no ha sido muy bueno este fin de semana y, nosotros, salimos cuando teníamos que salir. El único rato que no llovió.

A pesar del tacto y condiciones ambientales, curramos. No eran las mejores condiciones pero ahí estuvimos. La pared de la cantera, según los que saben de esto puede tener varias de las mejores vías de la escuela. Al menos las que probé así lo atestiguan.


Comenzamos calentando en AC/DC, 6c realmente pensábamos que estábamos en el 6b de al lado pero no... En fin. Tras una placa fácil bastante rota, se llega a un bloque de paso en desplome sobre una pequeña panza para salir a una repisa donde puede reposarse sin manos. Allí comienza una sección de placa en roca excepcional hasta la reunión. Más final esta sección final. Chula.


Después vamos al proyecto de Luismi que le dura el pegue de montarla y el siguiente tras comienzo fallido por resbalón, Parásito, 7b. buena vía con una entrada desplomada característica de las vías de este paño de roca. Un par de cintas y un bloque sobre regletas resbaladizas y paso de equilibrio para llegar al cazo "salvador" y, después, a aguantarle. Intensita. No llego a la "r". Llevo un calentón ya que...


Para terminar mi dura y primera jornada de roca después de 3 semanas, le doy a Titán, 7a+. Resolviendo todos los pasos y llegando a la cadena. Bonita vía. ¿Proyecto...? +1. Comienza con salida en desplome con paso de bloque explosivo. Después un par de cintas fáciles. Luego a navegar y aguantar hasta la llegada a la reunión sobre regletas que entre lo tostado que vas y que es fino...Habrá que ver si llego encadenando cuántas veces vuelo por allí...


Se nubla y comienza a chispear sobre las 17. Así que recogemos rápido y nos vamos al bar de Valmadrid a tomar unas buenas raciones y cervezas que nos lo hemos ganado. Seguimos!

domingo, 4 de abril de 2021

Resurrección

Semanas de descanso y levantar el pie del acelerador. De asimilar finales de etapas e inicios de otras. Curiosamente, hace poco más de un año, justo antes del confinamiento, me hice análisis porque me encontraba muy cansado. Aunque salieron bien y tras ellos pasé la enfermedad dichosa y estuve confinado, me hicieron pensar acerca de descansar voluntariamente (sin enfermedad o lesión de por medio) de vez en cuando…


Estas dos últimas semanas así lo he hecho. Hace falta levantar la cabeza, tomar aire cada cierto tiempo. Escuchar al cuerpo pero sobre todo a la cabeza. Al menos, a mí, he aprendido que me hace falta.

Por motivos que no vienen al caso comentar aquí, ese momento ha sido para mí este inicio de primavera. Estas dos semanas no he escalado ni salido al monte con otra pretensión que no fuera descansar, disfrutar y recuperarme física y mentalmente. Escribiendo estas líneas, me doy cuenta de que he hecho bien y lo apunto para futuras temporadas.



Hace una semana, me vinieron a recoger (literalmente) Dani, Sara y Lidi junto a Angus para ir al ibón de Piedrafita. Excursión “dominguerilla” muy chula y que no había hecho. Así que sin dejar de disfrutar de la compañía de amigos y sin dejar de ir a la montaña, tuve mi primera sesión de recuperación. Pequeños y sencillos placeres de la vida como son la conversación al caminar, vadear riachuelos, bajar con el culo por un nevero, tomar un bocadillo al sol en una piedra y meter las piernas en un ibón… Un lujo y una fortuna que te hacen sentir privilegiado además de recordar que estamos vivos.


El siguiente finde, bueno, días de Semana Santa…, los comienzo saliendo a correr y sudando/desintoxicando, quedando con amigos y descansando. También subo a Jaca con mi madre. Desde allí, el sábado, acudo a Yebra de Basa a caminar hasta el helero que se conserva en la loma que domina el pueblo con Luz y Marta, caminando solos por un bosque y un suelo plagado de flores. Al bajar, seguimos hasta San Román de Basa por una antigua calzada y fantaseamos con vivir (y trabajar) desde un lugar así. Comemos y bebemos, charlamos de esto y lo otro. Pasamos calor y nos abrigamos. 



Hoy, domingo de Resurrección vuelvo a Zaragoza. Seguimos!