Semana en la cara oculta del Moncayo

Primera semana de agosto que voy a pasar con David y Rober de Guías Cara Oculta alternando placer y trabajo. Y es que empiezo a colaborar con ellos en un proyecto ya consolidado pero con mucho recorrido todavía. Desde la escalada (y otras actividades en el medio natural, principalmente en la montaña) en la cara oculta del Moncayo y con sede en la villa de Calcena además pretenden ayudar en la lucha contra la despoblación del territorio.

Partimos por la mañana el lunes hacia Illueca. Lo primero que vamos a hacer es revisar el estado de las labores de reequipamiento y adecuación de la pequeña zona de escalada que hay a las afueras del pueblo. Dejamos para la vuelta visitar la reciente instalación del bulder municipal que se hizo...

Después de comer con Rober en Calcena, David y yo nos vamos a hacer una vía de largos a la peña de la mesa. Tras dudar cuál elegir nos decantamos por La Paz Serón, V+ de tres largos de V+ respectivamente. Nos desperezamos y lo pasamos bien. Primer día completado.

El segundo día, nos toca hacer deportiva. Rober sigue currando con Luis, un cliente/amigo escalador de Ermua que, además de estar muy fuerte y preparado, tiene ganas de seguir aprendiendo de la mano de un guía. Están haciendo estos días un curso avanzado de autorescate.

David y yo nos vamos buscando sombra a intentar hacer las mejores vías en su grado en la escuela... Vamos hacia la aguja Pilar Bolea donde Rober nos sugirió "La señorita, V+" que hacemos y constatamos que para su grado es dura. Una vía corta pero de calidad, técnica y que no da tregua desde la primera cinta a la "r". Ya que estamos ahí, hacemos "Los tallicos, 6a" que es una vía de apretón en las dos primeras cintas y ya... La clave, ver los tallados para salir del paso. Sin más.

Como el calor aprieta (hemos empezado algo tarde, con la calma...) os movemos al Sninfo. Allí, tras divagar un rato os decantamos por una vía que en su día me recomendaron y todavía no había probado, "Bolingas, 6a+". VIOTE. Qué bonita y divertida. Agradecida y con ambiente, de movimientos muy chulos y variados. Y larga. Hay que hacerla.

Nos vamos ya a comer que es la hora y después de descansar un rato, David y yo, mientras Rober y Luis vuelven al tajo, nos vamos a hacer la vía ferrata de Calcena. Una ferrata de nivel 2 sobre 6, fácil y entretenida con un final en arista y bonitas vistas de la zona. Además, la mayor parte del recorrido a media tarde es a la sombra. Hay 3 rápeles instalados pero la bajada es posible hacerla cómodamente andando. Optamos por ello.

Después de una opípara cena en casa de Rober y posterior tertulia, algo tarde ya nos retiramos. Vamos sobre la marcha sin plan cerrado pero con una lista de cosas y sitios que hacer y ver. De momento, a descansar.

Al despertar, decidimos a pesar de calor ir a conocer y patear los barrancos de Valdecogosto y de la Virgen en Purujosa. Gran acierto. Un recorrido de algo más de dos horas por el surco que durante siglos las aguas han cavado en la roca. Rodeado de paredes de caliza que sólo pensamos en escalar y en dónde sólo vemos vías y vías, vamos cruzando y pasando por encima del riachuelo que los manantiales de la zona surten de agua. Esta primera parte es muy agradable y protegida del Sol. 

Después de picar algo y beber agua en el desvío donde comienza el regreso hacia Beratón, hacia el barranco de la Virgen, señalizado por un gran hito, continuamos ya sin la protección de las paredes y el agua, con un sendero en espacio más abierto y una vegetación de robles y carrascas. Hace bastante calor pero el paso es cómodo y no hay gran desnivel, así que a la marcha... En esta última parte del recorrido vemos las paredes más atractivas para la escalada de todo el día. Hay un muraco al que bautizamos como "la ola" y nos deja alucinados... Recomendable paseo en un entorno único con una variedad de flora y fauna y flora brutal y unas formaciones geológicas espectaculares. Apto para hacer en familia.

El día siguiente (y último de este dark side trip) lo dedicamos a explorar localidades cercanas acerca de las cuales hemos oído hablar; de actividades, lugares, establecimientos, etc. que podrían ser interesantes de cara a la planificación de futuras actividades. La mañana no resulta muy productiva y, encima, el calor aprieta por lo que después de comer y descansar un rato, decidimos ir a las pozas del Batán, saliendo de Calcena en dirección a Trasobares.

El lugar resulta ser, además de muy bonito, tranquilo a pesar de haber más gente y relajante. Podemos disfrutar de unas aguas frescas aunque no gélidas como las del Pirineo... Que nos reconcilian con el día. Tras estar un rato chapoteando e incluso haciendo unos movimientos de psicobloc en una de las paredes de la poza, ponemos rumbo a Trasobares donde tomamos una cerveza y compramos miel.

Volvemos para pasar la última noche en Calcena. Rober nos invita a cenar a su casa y mientras recogen el material que Luis tenía en una vía, David y yo avanzamos con los preparativos de la cena, elaborada a base del resultado del trabajo de Rober y sus compis en la huerta que comparten.

Al día siguiente recogemos todo y tenemos que hacer una parada en Illueca pero no para graduar los bloques que se han montado en el búlder, sino porque la furgoneta se queja del cambio de marchas... La visita a Morata para fotografiar los sectores próximos a ser reequipados tendrá que esperar y llegamos a nuestras casas en taxi.... la furgoneta volverá a surcar las carreteras pero el bolsillo de David me temo que lo notará... Pero bueno, han sido unos días muy bien aprovechados. Seguimos..!